12 sicarios abatidos y 2 ministeriales resultaron heridos tras enfrentamiento la Carretera 100 en Hermosillo, Sonora. Crédito: Especial

HERMOSILLO

/REFORMA

La balacera del pasado sábado entre sicarios y policías locales en Hermosillo, Sonora, suma un saldo de 12 agresores abatidos, de acuerdo con autoridades locales.

La Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJE) reveló que el enfrentamiento, el cual ocurrió durante la tarde de ayer en la Carretera 100 Hermosillo-Bahía de Kino, se registró entre un grupo que intentó liberar a Carlos Humberto Limón, hijo del líder criminal Jesús Humberto Limón, "Chubeto".

Según reportes policiacos, el detenido pertenece al grupo criminal "Los Cazadores", los cuales hasta finales del año pasado estaban identificados como una célula criminal de "Los Chapitos", como se le conoce a los hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán, ex líder del Cártel de Sinaloa sentenciado en Estados Unidos.

"Al momento que se dio la agresión contra agentes ministeriales, se activó el código rojo, interviniendo las fuerzas del orden público de los tres niveles de gobierno, procediendo a la persecución de dicho grupo de vehículos", se explicó oficialmente.

"Como consecuencia de las acciones previamente mencionadas, 12 delincuentes fueron neutralizados y siete lograron escapar, algunos de los cuales se presume que están heridos.

Además, dos elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal resultaron lesionados y están recibiendo atención médica en un hospital bajo resguardo y se reportan fuera de peligro".

Además de los sicarios abatidos, se reportó también el aseguramiento de al menos 21 fusiles de asalto, entre ellos algunos de grueso calibre como lo son BARRET, SCAR, AR15 y AK47, así como un arma corta, cargadores de fusil, cargadores de caja, chalecos balísticos, cascos tácticos, vestimenta camuflajeada y cartuchos.

Asimismo, también seis camionetas que quedaron con varios impactos de bala.

Grupo REFORMA reportó que la balacera generó temor a quienes circulaban por la vía a la altura de un área conocida como Siete Cerros, como a los pasajeros de un autobús.

"¡Agáchate!", "¡Abajo!", "¡Bájate, bájate!", se escucha en un video que mismos pobladores registraron.